domingo, 10 de noviembre de 2013

Ribeira Sacra, el Camino hacia la "Vinae Sacrata"


El Camino de Santiago te busca, te encuentra, te conoce, y trata de sacar de ti aquellas cosas verdaderas que guardas grabadas con letras de pasión. Para mí el Camino ha significado mucho, por las historias que me ha contado a través de sus peregrinos, por todo lo que me ha hecho ver a través de su camino, por los motivos que me llevaron a hacerlo y por enseñarme, como me ha enseñado, la Ribera Sacra.

La Ribeira Sacra ocupa una extensión de de 2500ha de viñedo en 20 municipios situados a lo largo de las riberas del Miño y del Sil, en el Sur de la provincia de Lugo y Norte de la provincia de Orense. Estos municipios de agrupan en 5 subzonas : Chantada, Ribeiras do Miño, Amandi, Ribeiras do Sil y Quiroga do Bibei.

En 1996 se constituye el Concello Regulador de la Denominación de Origen Ribeira Sacra para proteger y garantizar la calidad de sus vinos. En la actualidad (datos 2012) cuenta con 1.263 ha de viñedo que cultivan 2.964 viticultores, produciendo 5.452.000 kg. El vino es embotellado (5.1 millones de litros), bajo el amparo de la D.O, por 96 bodegas.




SUBZONA CHANTADA
SUBZONA RIBEIRAS DO MIÑO
SUBZONA AMANDI
SUBZONA RIBEIRAS DO SIL
SUBZONA QUIROGA-BIBEI
Mapa de la D.O Ribeira Sacra con localización de las bodegas

 Desde que llegó a mis manos un vino de esta D.O., hace ya unos años, he estado muy interesado en conocer esta zona vitivinícola única e irrepetible, un espacio natural y artístico, mezcla de religiosidad y naturaleza, por lo que no podía desaprovechar la ocasión de conocer esta zona desde el punto de vista de un peregrino; cargado de espiritualidad, emoción y sacrificio, y así lo hice.
El Camino de Santiago atraviesa la Ribera Sacra a través de dos caminos:
  • El Camino Francés: es el camino por antonomasia, atraviesa la Ribeira Sacra en su zona norte, concretamente en los municipios de Paradela y Portomarín

  • El Camino de Invierno: ruta seguida por los peregrinos como alternativa a las nieves de O Cebreiro. El camino atraviesa los municipios de Quiroga, Ribas del Sil, A Pobra do Brollón, Monforte de Lemos, O Sabiñao y Chantada.




RIBEIRA SACRA, DESDE EL PUNTO DE VISTA DEL CAMINO FRANCES

Salimos de Sarria, dirección Portomarín, recorremos caminos sinuosos entre frondosos bosques de eucaliptos y carballos, visitamos iglesias de estilo románico gallego, caseríos de piedra y típicos hórreos.
        Camino Francés desde Sarria a Portomarín 

 Y ya, por fin, divisamos las primeras viñas, nos encontramos cerca de Portomarín, en la ribera del rio Miño.

Primeras viñas camino a Portomarín

Portomarín se encuentra en la subzona de Ribeiras do Miño, en su parte norte, esta zona es de clima atlántico de tendencia mediterránea, donde el río Miño actúa como agente termorregulador, sus suelos son ácidos, con una orografía poco abrupta, todo esto mas las orientaciones de los viñedos nos definen el "terroir" de esta parte norte de la Ribeira Sacra,muy diferente al de otras subzonas y e incluso dentro de la misma subzona, por lo que sería mas conveniente hacer una delimitación del terroir en la Ribeira Sacra, en lugar de la actual clasificación por subzonas, como ya hacen los franceses para definir la acusada personalidad de determinados vinos, que ha servido de fundamento para la jerarquización de los viñedos de los que proceden ( grands crus , premiéres crus ..) en zonas del prestigio de Borgoña o Burdeos.

Hacemos noche en Casa Santa Mariña (Portomarín) y hago referencia a este sitio porque este complejo rural posee el último viñedo (o el primero según como se miré) de la Ribeira Sacra,

  
Viñedo y Bodega de Casa Rural Santa Mariña

Su propietario Mario, un viticultor y bodeguero apasionado, posee un viñedo de Mencía a escasos metros del rio Miño, y una pequeña bodega donde elabora su propio vino de forma muy tradicional, con utensilios como unas cubas de roble de 6 arcos donde los fermenta. Tuve el placer de degustar "su Mencía" en un pequeño porche mirando a su viñedo y respirando la agradable brisa del rio Miño, maridado con una empanada gallega. La Ribeira Sacra ya estaba empezando a cautivarme.



RIBEIRA SACRA, DESDE EL PUNTO DE VISTA DEL CAMINO DE INVIERNO

 Mi paso por la Ribeira Sacra en el camino francés había sido corto, pero gratificante, ya que la mayor concentración de viñedos y bodegas se encuentran en su parte mas al sur, por lo que una vez culminado mi peregrinaje en la Catedral de Santiago de Compostela con la mochila cargada de vivencias, amistades y emociones, me desplacé hacia Monforte de Lemos para realizar una parte del Camino de Invierno y así conocer un poquito mas esta maravillosa zona vitivinícola.

Recorremos 23.8 Kms llenos de iglesias, monasterios, paisajes, y construcciones singulares (aquí os dejo el enlace donde podréis disfrutar de algunas fotos y descripciones de las distintas etapas del Camino de Invierno) llegamos a Belesar (Subzona Ribeiras Do Miño) donde nos recibe la Feria del Vino y de las Cerezas, ideal para reponer fuerzas a base de pulpo a la gallega, costillas a la brasa, cerezas y por supuesto Vino, en este caso opté por Godello.

VIII Feria del Vino y de las Cerezas de Belesar

En Belesar nos encontramos con Luisa Rubines, una emprendedora gallega (gerente de Quinta Sacra ) que vivió muchos años en Londres ejerciendo su profesión y que decidió volver a sus orígenes guiada por la fuerza de sus propios sueños y emprender un proyecto para mostrar los rincones únicos y prácticamente vírgenes de la Ribera Sacra. Esta artista, es una magnífica fotógrafa de la naturaleza y espiritualidad como muestran las exitosas exposiciones fotográficas que ha presentado como la incluida en su libro "De oca a oca ....por el Camino de Santiago" en el que relaciona el juego con la Ruta Jacobea, en una relación oculta y tachada de esotérica. El origen del juego de la oca, de hecho, parece surgir en el siglo XII, en relación a los templarios y a su labor como guardianes de santos lugares y caminos de peregrinación.

Es un lujo haber podido conocer los prodigios del Miño y la Ribeira Sacra navegando en este tramo fluvial y bajo la dirección de Luisa.



La Ribeira Sacra tiene la mayor concentración de románico de Europa. Este espacio de leyenda fue escogido, primero por los eremitas y más tarde por órdenes religiosas para edificar, primero pequeñas capillas y ermitas y, mas tarde hermosas iglesias y majestuosos monasterios.

"Sacra" significa "sagrado", y ello es por la gran cantidad de monasterios, templos e iglesias que se construyeron en los márgenes de las dos riberas. Del topónimo Rivoira se dice que proviene de las riberas que son bañadas por los ríos Sil y Miño, pero hay quien asegura que proviene del término "rovoyra" que significa robledal, por la gran cantidad de especies de querqus (Carballos) que pueblan y poblaban las riberas.

La Ribeira Sacra también fue motivo de atención para el Imperio Romano, que se asentó en sus márgenes para extraer oro, además, comenzaron a cultivar la vid, para ello idearon la disposición en terrazas, para salvar desniveles de terreno que pueden llegar al 100%.

Los bancales o muros son hoy uno de los elementos definitorios del paisaje y contribuyen a darle a la uva un carácter especial. Definen la uva de esta zona de la Ribeira Sacra, una pluviometría no muy elevada, la acción termorreguladora de los ríos, la orientación del viñedo que permite una exposición solar óptima y la disposición en escalera que favorece el drenaje de un suelo granítico-pizarroso y ácido.

 Toda la Ribeira Sacra es un espacio natural y artístico, mezcla de religiosidad y naturaleza, terrazas trabajadas por el hombre durante siglos para poder dominar la naturaleza y poder cultivar donde el sentido común dictaminaba que no se podía. La naturaleza no podía poner impedimentos ante tan bello paisaje.

Los Bancales cubiertos de cepas son un regalo para la vista, sin embargo, la pendiente del terreno dificulta mucho el trabajo, esto hace que la viticultura en esta zona sea especialmente compleja y de las que pueden presumir muy pocas Denominaciones de Origen en el mundo. Por ello la Ribeira Sacra pertenece a Cervin, organismo internacional que se encarga de poner en valor y difundir la Viticultura de Montaña o Viticultura Heróica. Estos viñedos han de tener dificultades estructurales permanentes como: Altitud superior a 500m, pendiente del terreno superior a 30%, viñedo en bancales o terrazas y pequeños viñedos.



La extracción de la uva en estos viñedos de pendientes tan pronunciadas resultaba muy dificultosa hasta que, en 1995, Don José Manuel López Santos, diseñó e instaló el primer Carril-Elevador de uva de la Ribeira Sacra. Fue en su viñedo de "Pena Escura" en el lugar de O Coio Branco, en la provincia de Amandi, del Ayuntamiento de Sober. Su acción desinteresada y sin ánimo de lucro, mejoró la Viticultura Heróica de la zona. La inspiración para el inventor no llegó a pie de ribera, sino en plena ascensión con el funicular de  Valle de los Caídos. En este enlace se puede votar para que a Don José Manuel se le reconozca ser el inventor del carril-elevador.

La mejor forma de contemplar la majestuosidad de los cañones es navegando, es difícil describir las sensaciones que se experimentan al contemplar esta obra de la naturaleza, estos accidentes geográficos tienen un origen meramente tectónico y no fluvial. En el cuaternario, al comenzar el basculamiento de la peniplanicie, se produjeron fracturas que quebraron el terreno en bloques gigantescos (de hasta 300m) formando así el cauce por el que fluyen parte del rio Sil y Miño.



Otro monumento geológico que nos encontramos es el espectacular meandro de O Cabo do Mundo del rio Miño entre Chantada y O Saviñao, comparable al del rio Alagón(Salamanca) aunque el mosaico natural y paisajístico que forman los bancales de viñedos y bosques de carballos,hacen de éste, un meandro único e irrepetible. En la curva del meandro nos encontramos una bonita playa fluvial de arena, se trata de la playa fluvial de la Cova, cuenta con arena de recreo y restaurante además de un cercano mirador

 O Cavo do Mundo

O Cavo do Mundo también se puede disfrutar desde las alturas, en el mirador que posee la Bodega Abadía da Cova , allí nos reciben con mucha cordialidad y después de enseñarnos sus instalaciones (tienen bien diferenciadas la zona de elaboración de sus vinos "top" con la de los otros, utilizando depósitos troncocónicos de madera de roble) nos prepararon una cata contemplando sus viñedos y el meandro O Cavo do Mundo, un verdadero lujo. Esta bodega posee un viñedo de unas 15ha con variedades de Godello, Mencía, Albarello, Merenzao, Albariño y Araúxa. Tiene una capacidad para 271250 litros de vino. Pudimos comprobar in situ la cantidad de premios que ha recibido esta bodega desde que en 1958 la fundaran los herederos de la familia Moure. Sus viñedos tienen una orientación ideal para aprovechar al máximo las horas de sol, que unido a las características propias de la viticultura heróica de la zona, dan unas uvas de mucha calidad y marcado carácter que se ve reflejado en sus vinos.



Volvemos a Belesar para continuar el Camino de Invierno, dirección a Chantada. Tras cruzar el puente (nos encontramos en la Subzona Chantada) continuamos por la antigua calzada romana denominada "Codos de Belesar" hasta llega a San Pedro de Líncora, donde las vistas del rio Miño y Belesar que dejamos al fondo, son de gran belleza. El camino avanza por una ribera de bancales de viñedos, salpicada de numerosas y antiguos refugios-bodegas, cada viña tiene el suyo, característicos de la ribera chantadina. Son pequeñas construcciones cuadradas de piedra, planta baja y cubierta de teja, donde el labrador, que pasaba el día en la viña y alejado de la vivienda habitual, podía refugiarse de las inclemencias del tiempo, guardar sus aperos de labranza. La entrada se protege por un parral, bajo cuya sombra podía descansar en las jornadas de fuerte sol.

Bancales de viñedos con numerosos refugios-bodegas

Seguimos nuestro ascenso y a la derecha del camino nos encontramos la Bodega Via Romana , allí nos atiende su encargado, un muchacho muy amable. que a pesar de estar ocupado con un grupo muy numeroso de motoristas que estaban comiendo en la bodega, no dudó en prestarnos su atención y nos enseñó todas las instalaciones, explicándonos los distintos procesos que utilizaban para la elaboración de su vino, y con mucha claridad (a pesar de que, según me dijo, solo llevaba 3 meses trabajando allí, pero seguro que todo eso no era nuevo para él). La Filosofía de esta bodega es que "El Vino no entiende de prisas" y la verdad es que no puedo estar mas de acuerdo con esa frase, y es que sus vinos son los únicos de la Ribera Sacra con un reposo mínimo de 6 meses en depósito y otros 6 en botella. Esta bodega posee un viñedo de 14ha de Godello y Mencía y tiene una capacidad para elaborar 165000 litros de vino. Nos prepararon una cata en un porche-mirador con unas vistas maravillosas a las laderas abancaladas del rio Miño. Otro lujo. 

No he querido describir las notas de cata de los vinos catados tanto de Abadía da Cova como Via Romana, ya que mis sentidos estaban demasiado influenciados por la belleza del paisaje y el encanto de sus gentes, por lo tanto describiré de forma general los vinos de las dos variedades mas representativas de la D.O Ribeira sacra; Mencía y Godello.

Los Vinos Mencía son de color de la cereza intensa, brillantes y con un ribete púrpura. En nariz producen una primera impresión agradable, siendo afrutados, de intensidad suficiente y de media a larga duración. Entran suaves en boca, provocando una sensación placentera. Su acidez es equilibrada y están bien de taninos. En retrogusto son elegantes y frutales, con vuelta de frutos rojos maduros, con una intensidad media y una persistencia prolongada.
 
Los Vinos Godello son frescos, afrutados y al mismo tiempo con una gran plenitud en boca con aromas intensos propios de la variedad como aromas rústicos, cargados de mineralidad, fruta blanca con toque herbáceo y una ligera fragancia floral.
 
Mi camino termina en Chantada y con ello un viaje apasionante y lleno de sensaciones difíciles de describir, me despido de la Ribeira Sacra con ganas de más, pero con la satisfacción de haber descubierto, en primera persona, un deslumbrante Tesoro tallado durante muchos siglos por la mano de la naturaleza y la del hombre, lleno de historia y espiritualidad, que dan como resultado unos caldos extraordinarios.
 
El gran valor patrimonial de la Ribeira Sacra debe de tener su reconocimiento como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y son ya muchos los apoyos que está recibiendo su candidatura.
 
Estoy seguro que, desde mi modesto conocimiento de esta zona, me he dejado en el tintero muchos detalles o he errado en algunas de mis explicaciones, pero espero haber trasmitido parte de lo que esta zona y sus gentes me han enseñado.
 
Hasta pronto Ribeira Sacra.